Abstract

¿Cómo ha sido la trayectoria de China y Argentina en ciencia y tecnología? ¿Qué políticas contribuyeron significativamente a su desarrollo? ¿Qué aprendizajes pueden extraerse del país asiatico para orientar el camino de desarrollo de la ciencia y tecnología en Argentina? El presente documento intenta responder estos interrogantes a partir del análisis de las trayectorias de la ciencia y tecnología en Argentina y China desde la década de 1940 hasta la actualidad. Se analizan aspectos institucionales, las principales políticas y experiencias en materia de planificación que han determinado los senderos del desarrollo científico y tecnológico de cada país. Al mismo tiempo se indaga sobre las posibles enseñanzas del caso chino y los desafíos principales para la formulación de políticas científicas y tecnológicas en Argentina.

Resumen ejecutivo

China se destaca por el énfasis estratégico que ha puesto la ciencia y tecno- logía (CyT) en las últimas décadas, fundamental para impulsar su crecimiento y desarrollo tecnológico. A pesar de las variaciones de la política científica y tecnológica en sus diferentes etapas de desarrollo, el papel del Estado en la orientación hacia el avance tecnológico ha sido el denominador común desde la mitad del siglo pasado.

El sistema de planificación estatal en China ha mantenido su relevancia a lo largo de las diferentes etapas de desarrollo tecnológico. En este sentido, los distintos planes quinquenales y programas tecnológicos han sido fundamen- tales en las transformaciones de su sistema nacional de innovación.

En Argentina, a pesar de haber tenido un inicio prometedor con la creación temprana de universidades e instituciones científicas en relación a la región latinoamericana, el desarrollo científico ha estado en gran parte de su historia desconectado de las demandas y requerimientos del desarrollo tecnológico de la estructura productiva del país.

En Argentina, si bien se pueden destacar algunas experiencias recientes en planes de mediano y largo plazo en materia científica y tecnológica, la mayoría de los casos no lograron alcanzar los objetivos propuestos, operaron de manera aislada con el resto del aparato institucional y se vieron interrumpidos por los cambios de gobiernos y sus distintas concepciones acerca del rol de la CyT para el desarrollo.

En los últimos años, China experimentó una complejización de su estructura productiva, vinculada a su estrategia de política científica y tecnológica. Inicialmente centrada en aprovechar las oportunidades de inversión extranjera para la transferencia de conocimientos y el desarrollo de capacidades locales. Posteriormente, con esfuerzos de inversión dirigidos hacia el desarrollo de capacidades autónomas en sectores tecnológicos emergentes con una alta demanda de conocimiento, tales como la robótica e inteligencia artificial.

En América Latina en general, y particularmente en Argentina, la falta de transformaciones estructurales en el sistema productivo y la construcción de capacidades tecnológicas tienen un impacto significativo en la disminución de los niveles de productividad y en el potencial de crecimiento a largo plazo.

En el informe se identifican los posibles desafíos para el caso argentino, entre los que se incluyen:

• Posicionar la CyT como una política de Estado sólida y estable.
• Aumentar la inversión en I+D e incentivar la inversión privada.
• Promover la colaboración y transferencia de conocimientos entre el sector público y privado.
• Reducir las disparidades regionales en CyT mediante una estrategia de inversión equitativa.
• Fortalecer las capacidades del Estado para gestionar políticas en CyT, con planificación estratégica y colaboración público-privada.